Amazon anunció la semana pasada su intención de adquirir Whole Foods por ~ 14 mil millones. La adquisición iniciaría la incursión de Amazon en el espacio físico, una inversión de la tendencia actual del comercio electrónico que está arrasando en la industria minorista. Las acciones de los minoristas de alimentos sufrieron un revés con el anuncio: las acciones de Walmart, CostCo, Target, Kroger cayeron, mientras que las acciones de Amazon y WholeFoods subieron.
¿Qué hay para Amazon?
Amazon podría obtener acceso inmediato y aprovechar la red de distribución de Whole Foods de más de 400 tiendas para expandir sus centros logísticos / ubicaciones de recogida. Podría ampliar su base de clientes aprovechando las sinergias en línea y fuera de línea.
¿Cómo transformará el panorama minorista? ¿Quién se beneficia?
Los beneficiarios directos del acuerdo serían los clientes, ya que una mayor competencia brindaría mejores servicios a tarifas competitivas. Pero el acuerdo es una mala noticia para los competidores de Amazon, que verían una reducción adicional en sus márgenes debido al aumento de las guerras de precios. Los más afectados serían las tiendas de comestibles más pequeñas con escala y flexibilidad financiera limitadas.
Advertencias ocultas
El acuerdo convertiría a Amazon en un megaproveedor para todas las necesidades del cliente, aumentando así los riesgos sistémicos. Esto podría desencadenar problemas antimonopolio en el futuro. Además, con los precios de las acciones de Whole Foods cotizando por encima del precio de oferta de Amazon de $42, quedan posibilidades de una guerra de ofertas de otros jugadores / competidores en el mercado. ¡Aún no es un trato cerrado!
Independientemente de si el acuerdo se concreta y cuándo, la fusión de los modelos en línea y fuera de línea definitivamente ha destacado las nuevas posibilidades de exhaustividad más allá del panorama minorista de alimentos dominado por las tiendas
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